Luka Doncic 'the Golden Boy'
El listón con Luka Doncic está tan alto que en una entrevista telefónica con periodistas de fuera de Estados Unidos sale el nombre de Michael Jordan y no sorprende. Su aterrizaje en la NBA está siendo fabuloso, a la altura de las mejores expectativas que se tenían sobre él. En sus nueve primeros partidos promedia 19,4 puntos, 6,6 rebotes y 4,6 asistencias, números muy pocas veces vistos en la historia de la liga para un jugador primerizo. El último en promediar 20+6+4 en su año de novato fue precisamente el exjugador de los Chicago Bulls, allá por 1985. "Jordan es el mejor jugador de la historia. Pero no creo que pueda compararme con él. Tuvo una carrera fantástica", respondió el esloveno, intentando alejarse.
Los primeros pasos de Doncic en la NBA no están siendo los de un novato cualquiera, sino los de uno que tiene colgado el cartel de estrella de la liga. No es un jugador más de los Dallas Mavericks, está siendo el líder en la cancha, igual que lo era en el Real Madrid: el máximo anotador, el segundo mejor asistente, el segundo mejor reboteador, el que más minutos juega... Ha pasado de ser cabeza de ratón a ser cabeza de león. Sin término medio. Recuerda al paso que dio Pau Gasol hace 17 años.
La temporada pasada promedió 25 minutos en el Madrid entre todas las competiciones (un poco más en la Euroliga, 26, que en la Liga Endesa). En sus primeros nueve partidos en la NBA ha jugado 34,9. En la liga norteamericana los partidos duran 48 minutos, pero si se ajusta el minutaje del esloveno, el resultado sigue siendo que ahora está en pista más tiempo: del 62,5 % de los minutos al 72,9 %.
Todo lo anterior, jugando más partidos que en el Madrid. Los Mavericks debutaron el 17 de octubre, hace 19 días, y desde entonces han jugado nueve partidos. Ajustarse a ese ritmo está siendo otro reto para Doncic, que de momento no lo está notando. El cambio de formato de la Euroliga, que desde hace dos temporadas añadió un tercer partido en varias semanas del calendario, le perparó para esa adaptación.
La cantidad de minutos de Doncic está a la altura de lo que jugaron en su primer año muchas grandes estrellas de la liga. Pau Gasol promedió 36,7 minutos por partido, Chris Paul jugó 36, los mismos que Larry Bird y un poco menos que Carmelo Anthony. Por encima están las marcas de Michael Jordan (38,3), Tim Duncan (39,1) y LeBron James (39,5), de quien se llevó una camiseta firmada la semana pasada tras jugar contra los Lakers.
Hay varios factores que explican la cantidad de minutos que está jugando el esloveno, empezando por el hecho de que en Europa se rota más. Doncic está recibiendo tratamiento de jugador franquicia. Es el mejor proyecto que tienen los Mavs para la próxima década, si no más. Y está más formado que cualquier jugador de su edad. Dennis Smith Jr, la gran otra gran apuesta de futuro de los Mavs, no superó los 30 minutos por partido el curso pasado.
Doncic no es el primer jugador que llega a la NBA con una carrera importante a sus espaldas. Manu Ginóbili debutó en los Spurs con 25 años y una Euroliga en su palmarés, como el exjugador del Real Madrid. Jorge Garbajosa, actual presidente de la Federación Española de Baloncesto, fichó por los Raptors con 29 años. Son dos ejemplos de novatos que en realidad no lo eran, pero Doncic se separa de ellos por su precocidad: tiene mucha experiencia y es muy joven. Por eso su entrenador en los Dallas Mavericks, Rick Carlisle, los define como un "novato único".
Uno de sus compañeros, el alemán Maxi Kleber, tiene claro que Doncic es un novato diferente. "En la forma en la que juega, puedes ver que es un jugador profesional desde hace años, jugando contra adultos. Esto no es muy nuevo para él. Por supuesto que es un estilo diferente de baloncesto, pero se ha adaptado muy bien", dijo en la misma entrevista telefónica. Preguntado por si puede ser uno de los mejores jugadores europeos de la historia, Kleber cree que todavía es pronto para saberlo, pero no se corta en elogios. "Luka es un jugador supertalentoso, con muchas habilidades, pero es un poco pronto porque solo ha jugado unos cuantos partidos en la NBA y hay que ver hacia dónde va. Pero tiene el talento para ser uno de los mejores, si no el mejor, jugador europeo de la historia (...) Mi opinión es que no tiene límite, puede hacer cualquier cosa. Ya se puede ver: la manera en que juega, lo eficiente que es... Es un talento muy especial".
Doncic no es ajeno a todos los halagos que le llegan, pero pone el rendimiento colectivo por delante del individual. Antes que el premio novato del año, para el que es uno de los principales favoritos, se centra en alcanzar los 'playoffs' con los Mavs. No será fácil. De momento, el equipo suma solo dos victorias en los nueve primeros partidos. El de las derrotas es otro aspecto al que tiene que adaptarse Doncic. "Para mí es muy difícil. Me enfado si no ganamos. Es duro. Pero quedan muchos partidos, vamos a mejorar y ganaremos".
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